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Las nueve revelaciones es un mierda, todo hay que decirlo. Es mejor leerse un cacho de cualquier cosa de Cortázar, o de Benedetti, por ejemplo. Le sacas más jugo. O más bien te lo sacan ellos a ti. O puedes leérselo a alguien que te guste y ver cómo es su jugo. Porque hasta el momento, que yo sepa, el jugo está en las personas, no existen los libros con jugo dentro, jugo vital, líquido entre las páginas quiero decir, no entre las letras, que de ése sobra. Con una pinzas de depilar pacientemente puedes despegar las letras de "El reloj de números romanos", por ejemplo. Una a una, sin romperlas. Cuando las tengas todas, hacen falta alrededor de cinco mil, las colocas en un aparato liquador de vaso grande. Conviene no dejarlas girar durante mucho tiempo, las palabras que giran y giran se echan a perder, se vuelen racias y amargas, y entonces hay que tirarlas, con el conviente disgusto para el autor. Del vaso de la liquadora van al enfriador, tal cual, para que no pierdan consistencia. Deben pasar algunas horas antes de poder tomarlas, y es exigencia de esta receta no tomarlas todas de golpe, y a ser posible en buena compañía.
Anda que rollazo que acabo de meter.
Lo dicho, pasa de leerle la Décima Revelación.
Un beso.
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Apoyo la recomendación de Benedetti, ya sea poesia, narrativa o ensayo merece mucho la pena. De Cortazar no he leido nada pero, por lo que sé, es una buena alternativa.
De todas formas no sé cual es tu estado de ánimo, deduzco que problemas existenciales, pero sin tenerlo claro no sé que más proponerte.
Besos, chau
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Lee Marinoff, habla de filosofía en sus libros, y se entiende muy bien, basandose en experiencias de otra gente. A muchos no les gusta pero personalmente me parecen interesantes, No es un libro de autoayuda, ni te va a hacer ver la vida de otra manera.... o si. Pero bueno entretiene. Y si no una buena borrachera y pa'lante. Pierdes el día de la borrachera y el siguiente por la resaca. A veces es mejor esto último, no todo está en los libros.....
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pues como dice angel a emborracharse jeje, pero esta vez sin arrepentimientos, ehhh un besazo pequeña araña :D
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Ciao me llamo Daniele desde Italia,si de veces en cuando te gustaria charlar cn un italiano,me ofrezco voluntario.Tengo un blog mejor de este http://blog.libero.it/reggioemilia/view.php?nocache=1185573803 Mi email ferraridaniele.df@libero.it ciao e baci da dani
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te imagino tu contra el pueblo, que piensen lo que quieran, que se metan en sus putos asuntos y disfruta de los momentos que estes con él y si te has equivocado lo has echo tu y no por el que dirán.
un besote pequeña araña (creo que te voy a empezar a llamar así, me gusta)
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Las nueve revelaciones es un mierda, todo hay que decirlo. Es mejor leerse un cacho de cualquier cosa de Cortázar, o de Benedetti, por ejemplo. Le sacas más jugo. O más bien te lo sacan ellos a ti. O puedes leérselo a alguien que te guste y ver cómo es su jugo. Porque hasta el momento, que yo sepa, el jugo está en las personas, no existen los libros con jugo dentro, jugo vital, líquido entre las páginas quiero decir, no entre las letras, que de ése sobra. Con una pinzas de depilar pacientemente puedes despegar las letras de "El reloj de números romanos", por ejemplo. Una a una, sin romperlas. Cuando las tengas todas, hacen falta alrededor de cinco mil, las colocas en un aparato liquador de vaso grande. Conviene no dejarlas girar durante mucho tiempo, las palabras que giran y giran se echan a perder, se vuelen racias y amargas, y entonces hay que tirarlas, con el conviente disgusto para el autor. Del vaso de la liquadora van al enfriador, tal cual, para que no pierdan consistencia. Deben pasar algunas horas antes de poder tomarlas, y es exigencia de esta receta no tomarlas todas de golpe, y a ser posible en buena compañía.
Anda que rollazo que acabo de meter.
Lo dicho, pasa de leerle la Décima Revelación.
Un beso.